Música maravillosa para un viernes nublado

No me resisto a compartir con vosotros 4 de mis más recientes subalegrías musicales, ciertamente variadas en sus estilos y planteamientos, pero con algo en común: capacidad para emocionar.

Así, sin más:

De Alison Krauss dicen que lo suyo es el bluegrass, ese melancólico género musical que hunde sus raíces en las tradiciones que los colonos ingleses, irlandeses y escoceses llevaron al Nuevo Mundo.

Francamente, no me puede importar menos la etiqueta cuando el resultado es tal que éste:

Me gustan especialmente los temas en los que va acompañada de la Union Station, una banda de tipos que no saben nada de música, como podréis comprobar en el vídeo anterior.

Si podéis conseguirlo, no os perdáis el doble SACD del concierto que ofreció en Louisville en primavera del 2002.

Bon Iver, o lo que viene a ser lo mismo, la banda de pop - folk liderada por Justin Vernon.

Precioso pop elegante, introspectivo, casi ambiental en ocasiones, con aires a los Sigur Ros más calmaditos pero con la diferencia (entre otras) de que aquí sí entendemos las letras.

El hermoso videoclip anterior está extraído del disco homónimo de Bon Iver, nombre que por cierto es un pequeño juego de palabras que tiene que ver con la serie Doctor en Alaska, la expresión bon hiver (buen invierno, en francés) y una tremenda mononucleosis hepática que obligo a Mr. Vernon a recluirse en una cabaña en medio del bosque y dedicarse a parir los temas del que fuera su disco anterior, el catárquico For Emma, Forever Ago.

Más cositas de Bon Iver en su web, que dicho sea de paso, es una pasada.

Cambio radicalmente de registro para hablaros ahora de  Jordi Savall, un prolífico musicólogo, violagambista y director de orquesta, probablemente más reconocido fuera de España que dentro de ella, incansablemente dedicado a preservar la herencia cultural que es, sin duda, nuestra música antigua. Hace nada que, gracias a la recomendación de un amigo, he entrado en contacto con la prolífica obra de Savall, que se extiende también a la música barroca y del Renacimiento. Poco puedo decir de ella sin reducirme a copiar a otros, por tanto mejor callo y me limito a presentaros una serie de trabajos conceptualmente relacionados que me han impresionado sobremanera. 

Se trata del Cant de la Sibil.la, 3 discos en los que Jordi Savall dirige a la Capella Reial de Catalunya y a Monteserrat Figueras interpretando diferentes cantos pertenecientes a esta tradición musical y drama litúrgico al mismo tiempo cuyos orígenes se remontan a la Edad Media. Aquí lo explican mucho mejor que yo.

Simplemente sobrecogedor. Añado raudo y veloz a mi lista de propósitos musicales de Año Nuevo el de ver una de estas Sibil.las  interpretada en directo en algún lugar repleto de ecos y silencios.

Ya para concluir me gustaría contaros de Horacio "Chango" Spasiuk. El Chango es un acordeonista argentino, de raices ucranianas, muy popular en su país.  Hace pocos días, y de nuevo gracias a un amigo con el que hablaba de la enorme Canción de Hielo y Fuego, de música y también de otras nostalgias en las que se complacen personas ya de cierta edad como yo, supe de Chango Spasiuk precisamente a través del vídeo que os muestro a continuación:

Me costó un buen rato cerrar la boca tras escuchar este tema. Sobran las palabras. Pensándolo bien, creo que mejor hago lo propio en este momento y me despido de vosotros deseándoos un muy feliz y ¿reflexivo? fin de semana.