jueves, 9 de agosto de 2012

De música y videojuegos

La música para videojuegos tiene mucho que ver, en mi opinión, con las bandas sonoras para el cine dado que el objetivo es el mismo, una sinergia entre lo que se ve y se oye. Al fin y al cabo más de un compositor habitual de estas últimas ha participado en la creación de obras para las primeras: Me viene a la memoria, por ejemplo, Harry Gregson - Williams y sus excelentes composiciones para los Metal Gear Solid de Playstation, como esta inolvidable para el Sons of Liberty.


En ocasiones la sinergia entre música e imágenes llega a extremos increíbles, como en la indefinible mezcla de shooter y juego de ritmo Child of Eden del genial Tetsuya Mizuguchi, que ya planteó algo similar hace unos cuantos años con su Rez en Dreamcast y Playstation 2. De hecho este Eden es una versión hiperbólica del primero, aprovechando la mayor potencia gráfica y las posibilidades de control por movimiento de las consolas de la presente generación:


Algún día tengo que jugar a esto en una Xbox 360 con Kinect delante de una pantalla enorme y un proyector. Ya simplemente hacerlo delante de una tele de cierta diagonal con el Move de PS3 y un sistema de sonido multicanal es una experiencia sensorial magnífica.

En otros casos la banda sonora es mucho más impresionista (por vaga) y simplemente acompaña sutilmente, pero de un modo maravilloso, para crear un determinado ambiente, como es en el caso de otro videojuego magnífico, con una estética yo diría que newage, como es Flower:


...y su continuación, al menos espiritual, Journey, al que aún no le he metido mano:


Haciendo memoria os propongo 4 temas / bandas sonoras más que me han gustado mucho:

1. La banda sonora de Final Fantasy X (PS2) en general y este tema (To Zanarkand) en particular. Nobuo Uetmasu en su máximo esplendor.


2. La banda sonora de ICO (PS2), una de esas bso compuesta fundamentalmente por sonidos de ambiente que insinua y acompaña, más que otra cosa, para acrecentar la sensación de soledad y desamparo total del protagonista, pero que sin embargo incluye una magnífica sorpresa en forma de tema vocal. Todo obra de Michiru Ōshima (ojo con el segundo vídeo si pensáis jugarlo porque es un spoiler en toda regla, nada más y nada menos que la secuencia final del juego).



3. El tema introductorio de Kingdom Hearts, una preciosa composición de la que ya hablé hace tiempo en este blog y que define perfectamente el carácter de lo que está por venir en el juego y, a mi al menos, me deja con una sonrisa y profunda cara de tonto cada vez que la escucho. En este caso se la debemos a una mujer, Yoko Shimomura.


4. La bso de Silent Hill 2, un alucinante viaje a las profundidades del horror y la paranoia. Me gustaría destacar dos composiciones, Theme of Laura y Promise, ambas en su versión extendida. El compositor es Akira Yamaoka.



¿Y cuales son las vuestras?

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